En primer lugar pediros disculpas porque esta semana no tengo tiempo de analizar en profundidad el circuito frances. De todas formas he buscado por internet y este analisis que he encontrado me parece interesante:
La pista francesa demanda una carga aerodinámica media-alta. El principal motivo son las rapidísimas curvas iniciales y las chicanes de alta velocidad en las curvas 6/7 y 11/12. El principal punto de adelantamiento en Magny Cours es la frenada de la horquilla de Adelaida, que viene precedida por una larga recta donde la velocidad punta es clave. A diferencia de los circuitos de Tilke, esta recta viene precedida por una curva rapidísima que hace que engancharse bien al coche precedente a la entrada de la recta sea un pelín complicado, por lo que muchos adelantamientos tienen que hacerse apurando a tope la frenada para la horquilla.
Ya que estamos en la horquilla, y como sucede siempre que hay curvas lentas, es muy importante tener una buena tracción a la salida de las curvas. Muchos intentos de adelantamiento en Adelaida se logran recuperar gracias a la tracción del monoplaza saliendo de la curva mejor que el coche que ha tenido que entrar apurando. En este punto la tracción que provenga del motor será muy importante, aunque la suspensión se pueda reglar un poco más blanda para mejorar el grip, no es lo más adecuado.
Otra de las características de Magny Cours son sus generosos pianos. Para ganar tiempo en una vuelta, hay que comerse literalmente los pianos, y las imágenes que siempre nos deja la última chicane del circuito son realmente espectaculares. Eso sí, habrá que atacarlos con especial cuidado en carrera si no se quieren tener problemas de trompos.
Para acabar, esta es una pista que no castiga especialmente el motor ni las gomas. Con uno de los pit-lanes que menos tiempo hacen perder del Mundial, las estrategias aquí pueden ser muy diversas.